Tatuajes de costurera
Hace unos días que finalicé mi lectura de El tiempo entre costuras, de María Dueñas. Como suele ser frecuente en mí, en cada libro brotan algunas líneas que se tatuan en mi mente. He aquí la página que decidí marcar, aún no sé el por qué:
La normalidad no era más que lo que mi propia voluntad, mi compromiso y mi palabra aceptaran que fuera y, por eso, siempre estaría conmigo. Buscarla en otro sitio o quererla recuperar del ayer no tenía el menor sentido.
La normalidad no era más que lo que mi propia voluntad, mi compromiso y mi palabra aceptaran que fuera y, por eso, siempre estaría conmigo. Buscarla en otro sitio o quererla recuperar del ayer no tenía el menor sentido.
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